¿Qué es el Triptófano?

El Triptófano es un aminoácido necesario para el crecimiento normal en los bebés y para la producción y mantenimiento de las proteínas, músculos, enzimas y neurotransmisores del cuerpo. Es uno de los ocho aminoácidos esenciales. El cuerpo no lo puede producir, por lo cual se tienen que obtener de la alimentación.

Funciones

El cuerpo utiliza el triptófano para ayudar a producir la melatonina y la serotonina.

La melatonina ayuda a regular el ciclo de sueño y vigilia y se cree que la serotonina ayuda a regular el hambre, el sueño, el estado de ánimo, el estrés, y el dolor.

El hígado también puede utilizar el triptófano para producir niacina (vitamina B3), la cual es necesaria para el metabolismo energético y la producción de ADN.

Para que el Triptófano se convierta en niacina, el cuerpo necesita tener suficiente hierro, riboflavina y vitamina B6.

Importancia añadida del Triptófano

Para reforzar el sistema inmunitario, entre otros cosas hay que respetar el descanso nocturno.

Es importante respetar un ritmo regular de horas de sueño. Se recomienda dormir entre seis y ocho horas, según la edad y el tipo de actividad, puesto que algunas células defensivas se producen durante la noche.

Hay que poner de relieve la importancia añadida de regular el sueño. La carencia de descanso disminuye las defensas.

No hay que explicar mucho que las defensas son básicas porque nuestro organismo supere cualquier episodio de alteración de la salud.

He podido comprobar que, en situaciones donde no podía disfrutar de uno su reparador, mis defensas se alteraban y acababa cogiendo la gripe o un resfriado. A todos nos ha pasado esto.

De aquí que comparta mi experiencia en este sentido... el Triptófano me ha ayudado a regular el sueño y a sentirme más optimista.

Por otro lado, otra alteración que deriva de la carencia de regulación del sueño es el exceso de ingesta de alimentos azucarados, que puedo asegurar que es cierto en mi caso.

El hecho de regular el sueño hace que disminuya la necesidad de ingesta excesiva de azúcares (chocolate, galletas...) que era muy evidente que iba relacionada.

¿De dónde podemos obtener el Triptófano?

De alimentos de origen animal, como el queso, el pollo, el pavo, las claras de huevos, el pez y la leche, por ejemplo.

De alimentos de origen vegetal, como las semillas de girasol, el cacahuete, las semillas de calabaza, las semillas de sésamo y las judías de soja, entre otros.

El método más sencillo y rápido: Cápsulas de Triptófano.

No resulta fácil obtener este elemento a través de la alimentación, porque se trata de un aminoácido y no tenemos claras las cantidades que nos hacen falta, a nivel individual, por comida y día. Además que es incómodo ir tirando cálculos de todo.

Yo he llegado a la conclusión que es más cómodo y eficiente tomar las cápsulas de Triptófano, en la cantidad que indica el prospecto, y listos.

En cualquier caso, siempre podemos preguntar a nuestro profesional de la salud de confianza, al farmacéutico, al médico o al nutricionista, en caso de duda.



Referencias bibliográficas:


https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/002332.htm

https://ca.wikipedia.org/wiki/tript%C3%B2fan

https://drjordifores.com/millors-antidepressius-naturals/